A menos de un año de su 30 aniversario como Reserva de Biosfera (2023), Menorca cuida y protege su valioso patrimonio natural
Con una superficie de unos 700 km2 y cerca de 200 km de costa, Menorca atesora de 119 playas y calas que suponen un 9% de su línea de costa. La ampliación en 2019 de la delimitación de su zona protegida hacia el mar convirtió a la isla balear en la Reserva de Biosfera con más superficie marina del Mediterráneo. Menorca lleva casi tres décadas trabajando para mantener este reconocimiento. Una isla con acantilados rutilantes y con sistemas dunares y humedales costeros que constituyen uno de los ecosistemas más ricos de la isla, en cuanto a diversidad y singularidad de las especies que los habitan. Mantenerlos de forma sostenible y protegerlos es su gran apuesta. Y estas son 5 claves para ello
1–Calidad del agua purificada por la Posidonia óceanica
Esta planta endémica del Mediterráneo forma auténticas praderas submarinas en la costa menorquina que juegan un importantísimo rol como productoras de vida y oxígeno. Entre sus hojas y rizomas se aloja una elevada diversidad de organismos integrando una cadena en la que unos se alimentan de otros. Estas praderas fijan los fondos de arena gracias a las raíces de las plantas, con un importante efecto amortiguador del oleaje impidiendo tanto la erosión de la costa como la regresión de las playas arenosas. Además, tienen un importante efecto de depuración de las aguas costeras al limpiarlas de sedimentos. La actividad del secuestro de CO2 y producción de oxígeno de las praderas de Posidonia contribuye a la mitigación del cambio climático.
2–Recuperación de los sistemas dunares
Otra de las ‘joyas naturales’ de Menorca como Reserva de Biosfera son los sistemas dunares de muchas de sus playas y calas. Para conservarlos, Menorca lleva quince años adoptando medidas para protegerlas, como el desplazamiento de los aparcamientos fuera de esos sistemas dunares y medidas de conducción de los usuarios. Un estudio presentado en mayo pasado concluye que se aprecia una recuperación general, tanto en vegetación como en morfología, con viales cerrados y primeras líneas dunares regeneradas, reestructuradas, densificadas e incluso ganando terreno a la propia arena libre. Este estudio analizó para ello nueve sistemas dunares de los 28 que hay en Menorca: dos en la zona de Migjorn (Son Saura y Son Bou) y siete en la zona norte, de tramontana (Algaiarens, Pregondó, Binimel.la, Cavalleria, Tirant, Arenal de Son Saura del Nord (Son Parc) y Es Grau).
3–Fomento del acceso a las playas con transporte público
Menorca atesora playas vírgenes de inmensa belleza, como Macarella, en la costa sur, que tanto menorquines como foráneos desean visitar –¡y disfrutar!– especialmente en los meses veraniegos. Y la mejor manera de conseguir que todos puedan acceder por tierra a la playa soñada, salvaguardando el medio ambiente, es mediante un servicio público de transporte. Así, en los últimos años se han puesto en marcha ‘autobuses lanzadera’ a entornos playeros como Macarella/Macarelleta o Favàritx (Cala Tortuga, Cala Presili) para evitar atascos y ayudar a la conservación del equilibrio natural de playas únicas. En estos casos, llegar en vehículo particular no está permitido. Para acceder a más de 25 playas en bus: http://mout.cime.es/Contingut.aspx?IdPub=8394
4–Limitación al acceso con vehículo privado
Hay otras playas vírgenes de gran belleza, como Cala en Turqueta o Son Saura (en la costa sur, municipio de Ciutadella) o Algaiarens (al noroeste) en las que no está prohibido en acceso en vehículo particular… pero sí con aparcamiento de aforo limitado. Estas playas disponen de paneles luminosos que advierten del aforo del aparcamiento. Y también otras, como Cala Mitjana (municipio de Ferreries), que disponen de controladores para evitar colapsos de coches en entornos naturales que puedan verse perjudicados.
5–Iniciativas ciudadanas para la reducción de plásticos
Una es ‘Plastic Free Menorca’ (https://www.plasticfreemenorca.org/es/inicio), alianza de varias entidades menorquinas con importante trayectoria en la protección y preservación del entorno, para luchar contra el plástico de un solo uso con un claro objetivo: Menorca libre de plásticos. Para ello, han implementado dos certificaciones: ‘Compromiso Plastic Free Menorca’, para empresas fuera del sector Horeca; y ‘Plastic Free Balearics’, para miembros del sector Horeca. Y entre sus proyectos está el ‘PescaArt Menorca’, basado en la economía circular, para la reutilización creativa de las redes de pesca descartadas por los pescadores.
Otra iniciativa es la del movimiento ‘0 Plastic Menorca’ (https://www.0plastic.es/) cuya misión es concienciar y sensibilizar sobre la reducción y reutilización de los plásticos, educar sobre el problema y soluciones concretas; y promover el turismo sostenible en Menorca como ejemplo de éxito en el Mediterráneo, involucrando a personas y organizaciones tanto de la isla como de fuera. Entre los proyectos desarrollados hasta la fecha está el de ‘Kilómetros de plástico por iris’ (para estudiantes, con el objetivo de recorrer 10.000 kms recogiendo esos residuos) o el concurso ‘1 minuto por tu isla’ (también para estudiantes, consistente en crear un vídeo de 1 minuto con el que contar cómo ganarle la batalla al plástico).
Más información de destino en: www.menorca.es