La Presidenta de la Asociación Española de Campos de Golf, entrevistada hoy viernes en ‘MIRADAS VIAJERAS TV’ (Negocios TV, Canal 125 de Movistar +)
¿Qué impacto tiene el turismo de golf en España? ¿Por qué somos el primer país del mundo en recepción de turistas de golf? ¿Cómo le ha afectado la pandemia al Sector? ¿Cuáles son sus retos? ¿Qué supone para el refuerzo de la Marca España? Todos estos, y otros temas, han sido analizados esta mañana por Claudia Hernández, Presidenta de la Asociación Española de Campos de Golf, en ‘Miradas Viajeras TV’. Entrevistada en el Champions Bar del Hotel Madrid Marriott Auditorium, Claudia ha respondido a las preguntas de Fernando Valmaseda. Más que un mero deporte, el golf es una industria turística que “crea empleo, bienestar y riqueza; más de 121.000 puestos de trabajo directos e indirectos y el 95% de ellos son fijos y a jornada completa”, afirma. Y añade convencida: “El golf tiene que ser la palanca de recuperación para el turismo español”
Claudia Hernández, empresaria y técnica en actividades turísticas, lleva cerca de 30 años ligada al mundo del golf y, desde hace cuatro años, es la Presidenta de la Asociación Española de Campos de Golf, creada a finales de 2015, en la que están integrados más de la mitad de los casi 400 campos que hay en España. “Nuestra Asociación es la patronal del golf. Luchamos por la defensa de los intereses empresariales del negocio; y no solo trabajamos para nuestros asociados, nuestra labor repercute en todos. Las federaciones trabajan en la promoción del deporte y nosotros en la parte empresarial”.
Según un estudio sobre el impacto económico del golf en España realizado por la propia Asociación, junto con la Federación España y el Instituto de Empresa (IE), “el golf en España es un motor turístico; una industria que genera cerca de 13.000 millones de euros de forma directa o indirecta. Además, somos el primer país del mundo en Turismo internacional de golf [por delante de EE.UU., primero a nivel de turismo local]. Cada año vienen a jugar a España 1,2 millones de turistas que generan esos grandes ingresos; pero con un matiz: 7 de cada 8 euros van a parar a otros sectores económicos distintos al nuestro. El golf reparte infinitamente más de lo que recibe”. Por eso considera que “hemos sido muy maltratados pese a que generamos riqueza y empleo. Según el citado estudio, más de 121.000 puestos de trabajo, directos e indirectos; y además, el 95% de los puestos de trabajo directos del golf son empleo de calidad, fijos y a jornada completa”. En este sentido, destaca la gran mejora en cuanto al nivel de los trabajadores: “La profesionalidad es cada vez mayor como, por ejemplo, la de los ‘greenkeepers’; hace dos décadas eran jardineros, ahora son personal especializado en el cuidado de los campos. Pero hay que seguir apostando por la calidad porque cada vez tenemos más competencia en países cercanos como Portugal, Marruecos, Francia, Italia o Turquía”.
Claudia Hernández defiende que “el golf es un sector estratégico dentro del Turismo en nuestro país porque el turista de golf gasta más, pernocta más y es una actividad desestacionalizadora al jugarse durante todo el año. Somos complementarios al turismo de ‘sol y playa’ con lo que generamos empleo no solo en nuestros campos sino en el entorno. Antes los hoteles cerraban en cuanto terminaba la temporada veraniega; ahora, si tienen un campo de golf, se mantienen abiertos todo el año”.
Como el resto del sector turístico, el del golf se ha visto muy afectado por la pandemia. “Han sido meses frenéticos en los que no pensaba en el futuro sino en solucionar los problemas más inmediatos. Y hemos seguido trabajando porque el campo es un ser vivo y hay que cuidarlo día a día. Luego, cuando acabó el confinamiento domiciliario, abrieron todos los campos de golf de España, incluso con pérdidas, para dar un toque de confianza y demostrar que somos una actividad saludable, sin riesgo, sin contacto y podíamos empezar a tirar del carro del turismo. Queríamos lanzar un mensaje al mundo que podemos recibir turismo de forma segura y los campos de golf son un claro ejemplo”.
Claudia Hernández se siente orgullosa de que “durante estos cuatro años que llevo al frente hemos logrado formar una piña, trabajar unidos”, pero le duele que las medidas tomadas para combatir la pandemia no hayan sido las más adecuadas: “Han sido nefastas para el sector turístico en general y el nuestro en particular; por eso en estos meses nos hemos reunido con todas las administraciones e incluso con los cinco principales partidos políticos para que sepan la realidad del golf y que cuando se tomen medidas se acuerden de nosotros. En el resto del mundo el golf es solo deporte; en España es deporte y turismo, las dos cosas. Por eso no entiendo que al turista le cobren un 10% de IVA en un hotel y en el campo de golf un 21%. No pedimos una rebaja… sino que se corrija este error; el golf tiene un IVA que no le corresponde como sector turístico que es”.
Además del IVA, Claudia Hernández reclama otras medidas para su sector como “la bajada o supresión de impuestos para este año, moratorias en los ICOS, exenciones en las cuotas de la seguridad social… medidas que nos permitan salir adelante. Antes se trataba de aguantar, ahora de sobrevivir; con medidas para mantener a los trabajadores y otras para recuperar a los clientes, sobre todo a nivel sanitario. Es mucho más rentable hacer PCR´s a todos los turistas que entren en España que lo que estamos perdiendo en turismo. Se ha demostrado que el golf es un deporte saludable y distanciado. El problema es no haber dejado traer a los turistas extranjeros. Pero el golf tiene que ser la palanca de recuperación para el sector turístico español”. Y añade: “El 25% de los turistas que vienen a jugar a España tienen segunda residencia en nuestro país. Son 283.000 turistas de golf y eso genera una inversión inmobiliaria de 42.000 millones de euros anuales. Además son turistas que repiten, como mínimo tres veces al año, generando un gasto recurrente. Ahora, con el teletrabajo, esos resorts que tenemos con campos de golf van a atraer a ingleses y alemanes, que están locos por venir aquí a trabajar y pasar tiempo”.
Dada su importancia como subsector dentro del turismo español, Claudia Hernández considera que el golf puede ser un elemento unificador y representativo de la Marca España en el exterior. “Al margen de tener grandes profesionales [entre ellos Jon Rahm, que el pasado año llegó a ser número uno mundial] el turismo de golf es Marca España y sería muy fácil recuperar la confianza de los clientes porque tenemos un gran prestigio mundial. Los empresarios están tirando del carro la pega son los gobiernos, en España y en Europa; cada país es un desbarajuste. Sin embargo en nuestras empresas tenemos los protocolos bien definidos y no se contagia nadie”.
Uno de los retos que afronta la Asociación es convertir el golf en un deporte de masas, como ocurre en países como EE.UU o Reino Unido. “No es cierto que el golf sea un deporte exclusivo, depende de donde juegues o del material que adquieras. Puedes comprar el mejor equipo o el más económico; puedes jugar en Valderrama [en Sotogrande (Cádiz), el mejor de España] o en el Hércules de Galicia, por poner un ejemplo. El golf es asequible a la mayoría de bolsillos; hay gimnasios de moda que son más caros que un club de golf. Tenemos capacidad, infraestructuras y mucho margen aún de crecimiento, y eso es bueno. Si cuidamos este sector, por la importancia que tiene, podemos seguir creciendo pues aun no hemos llegado al límite”.
Otro reto es cuidar al turista de golf nacional que es quien salvó la pasada temporada. “Es importantísimo porque podemos llamar turistas a todos los jugadores porque les encanta moverse, ir a campos de otras zonas y hacer un poco de turismo en ellas. El turismo nacional de golf ha crecido en estos últimos meses porque es un deporte saludable y sin riesgo de contagios. ¿Reinventarnos? Llevamos 10 meses reinventándonos y creando protocolos especiales. Lo que nos sobra es espacio; en el cuarto de palos el cliente lo encuentra todo ordenado y bien separadas todas las bolsas. También es fundamental el tema de la digitalización que en los próximos años será uno de los puntos que nos hará crecer, junto al medioambiental”.
En cuanto a lo que le ha enseñado esta pandemia, Claudia Hernández afirma que “está siendo una experiencia insólita. El sufrimiento nos ha hecho menos duros, más compasivos y más humanos. Pero me rebela que se haya abandonado a muchos sectores económicos y también dejado un poco de lado a otras enfermedades que no son el COVID-19”. Y se muestra también crítica porque “a mí me encanta salir de las contrariedades creciendo y no lo estamos sabiendo hacer. Podíamos haber avanzado en nuestras empresas, en la administración, y no lo hemos hecho”.