La primera gran escapada vacacional del año es ideal para visitar la isla balear… sin perder de vista las tradiciones religiosas de la Pascua
¿Interior o costa? ¿Procesiones u ocio? Esta es la constante disyuntiva a la hora de afrontar las primeras mini vacaciones anuales: Semana Santa. Pero… ¿por qué no fusionar ambas opciones y en un lugar distinto? Ese destino especial puede bien ser Formentera. Sin la vorágine turística del verano –por ser referente vacacional de sol y playa– la menor de las Pitiusas combina la posibilidad de unos relajados días de desconexión junto al mar con el recogimiento espiritual que suponen las tradiciones religiosas, como la Procesión de Jesús Nazareno, el Jueves Santo, en Sant Ferran; o el Vía Crucis viviente del Viernes Santo en Sant Francesc, la capital insular.
¿Semana Santa en Formentera? Pues sí, ¡por qué no! La isla balear, por su excelente climatología, es un destino para todo el año, no solo para el verano. Y precisamente esa bonanza clímática unida a la ausencia de la vorágine turística estival es lo que la convierte en un lugar a tener en cuenta para una escapada fuera de temporada. Y si es con algunos días más que el simple weekend, mucho mejor.
Del 5 al 12 de abril –o lo que es lo mismo, del Domingo de Ramos al Domingo de Resurrección– Formentera vive también, a su estilo, los rituales tradicionales que enmarcan la Semana Santa católica. El primero de ellos, la Bendición de Ramos del domingo 5, en el Pilar de la Mola (10.00 h), Sant Ferran (10.30 h) y Sant Francesc (12.00 h), localidad que también celebrará (20.00 h) la primera procesión.
El Jueves Santo, Sant Ferran, población ubicada en el corazón de la isla y cruce de caminos, acogerá la Procesión de Jesús Nazareno, a cargo de la única cofradía seglar registrada en la isla e integrada por 80 miembros, ataviados con túnicas moradas y cordón de oro. El Viernes Santo se celebrarán tres representaciones del Calvario de Jesús. Sant Francesc, la capital administrativa, será escenario a las 12.00 h de un Vía Crucis viviente en el que participarán medio centenar de personas de todas las edades. La del Pilar de la Mola, a las 17.00 h, transcurre por el trazado original, que pasa por un camino. Y la de Sant Ferran, nocturna, arrancará a las 20.00 h. La propia Sant Ferran pondrá cierre a la Pascua con la misa del Domingo de Resurrección en su iglesia, la más pequeña de las tres parroquiales de la isla, inaugurada en 1889 y declarada Bien de Interés Cultural.
Actos religiosos al margen, la escapada a Formentera por Pascua permitirá admirar el espectáculo natural de sobresalir los pocos campos de grano o brotar las flores primaverales, recorriendo la isla a pie o en bicicleta a través de sus 32 Rutas Verdes; pasear por las playas, en está epoca semidesiertas; o disfrutar de mágicos amaneceres en el faro de la Mola… y de románticos crepúsculos en Cala Saona o Cabo de Barberia. Toda una recarga de energía vital en este auténtico paraíso mediterráneo.
www.formentera.es